martes, 13 de noviembre de 2007

Estrategias de enseñanza del programa AILEM-UC

AILEM-UC es un programa de la Pontificia Universidad Católica de Chile, creado con el fin de entregar diversas estrategias innovadoras en la enseñanza de la escritura, lectura y matemáticas en educación básica.
Como los niños cada vez están más abiertos a los nuevos conocimientos gracias a la globalización y a la sobre información que reciben cada día a través de los distintos medios de comunicación, se optó por integrar algunas de estas estrategias también a nivel de Educación Inicial. Por esta razón es importante destacar que estas estrategias deben llevarse a cabo en ambientes preparados, y bajo la planificación de un adulto responsable.
Algunas de estas estrategias y sobre las cuales hablaré en esta publicación son las siguientes:
Lectura en Voz Alta, Escritura Interactiva y Lectura Compartida.

La Lectura en Voz alta como la describen Baeza y Razmilic (Baeza, P y Razmilic, T 2006-2007) es una estrategia mediante la cual el profesor prepara un espacio de la sala apto para el grupo completo (curso), dónde todos puedan ver a la educadora y el papelógrafo o cuento que se vaya a presentar. Así también, este espacio debe generar confianza y seguridad en los niños, lo que proporcionará las oportunidades para que todos participen activamente y sin miedo de equivocarse.
Esta estrategia consiste en que el profesor, frente a sus alumnos y luego de recordar las reglas y normas de clase, lee a los niños un texto previamente seleccionado, dando énfasis a las distintas palabras y oraciones que quiera resaltar, con el fin de trabajar distintos focos de atención.
El profesor les enseña a sus alumnos estrategias específicas de lectura, conceptos acerca de lo impreso, cómo funcionan los textos y el vocabulario (Baeza, P y Razmilic, T 2006-2007). Además esta lectura es presentada como fuente de placer, de información, aprendizaje, medio de perfeccionamiento y enriquecimiento lingüístico entre otras, lo que le permitirá a los niños relacionarse de manera afectiva con los demás.
Durante la lectura, los alumnos van conectando la información entregada con sus conocimientos previos y a través de las predicciones que pueden hacer sobre los textos. Así como también van clarificando con la ayuda del profesor las palabras que aparecen en el texto y de las cuales no conocen el significado.
Es importante que luego de la lectura, los textos queden al alcance de los niños, ya que esa manera van a poder ir reforzando su vocabulario y ampliando sus conocimientos acerca de lo impreso.

Otra estrategia que encontramos en el programa AILEM-UC es la escritura interactiva (Baeza, P. Solis,MC.Suzuki,E. Razmilic,T 2006-2007), dónde el profesor y los alumnos conjuntamente componen y escriben un texto.
En tres tipos de escritura interactiva: la transcripción o reconstrucción de un texto, la innovación o cambio de un texto ya familiar y la negociación que se refiere a una composición original. En esta estrategia los niños van relacionando los sonidos de las palabras con la decodificación de estas, lo que los ayuda a ver la relación existente entre la lectura y la escritura.
Es una estrategia de proximidad y de grupo completo (curso) al igual que la anterior, solo que esta vez lo principal es la escritura a partir de algún tema de clases o de alguna puesta en común realizada antes de la actividad.
La educadora en este caso escoge según sus habilidades qué es lo que van a escribir los niños, de manera que todos tengan éxito en sus interacciones. Los niños se pueden apoyar en las paredes de palabras existentes en la sala de clases, en los abecedarios, o en otras lecturas o escrituras anteriores trabajadas en clase. Mientras uno de los niños escribe en el papelógrafo, la educadora sigue trabajando con el resto del grupo, de manera que todos estén motivados y aprendan de igual forma.
Es importante que la educadora informe acerca de los distintos tipos de texto que escriben. Por ejemplo si son heurísticos, informativos, expresivos o de función normativa. Luego de realizada la escritura, se va corrigiendo en el mismo momento siendo los niños quienes encuentren las respuestas correctas gracias a la guía del profesor. El cual relee varias veces el texto con el fin de encontrar los focos de aprendizaje planificados previamente.

Por último hablaremos de la estrategia de Lectura Compartida, en la cuál el profesor y los alumnos comparten la tarea de leer (Baeza, P. Solís,MC. Razmilic, T 2006-2007). La presentación del libro o texto debe ser con un propósito placentero entregando un ambiente cálido y de apoyo en e cual al igual que las estrategias anteriores se presenta en un espacio compartido de proximidad, con el grupo completo (curso).
Durante esta lectura el profesor modelará la fluidez de la lectura, e incentivará a los niños a participar activamente, formulándoles preguntas acerca de lo que están leyendo, y creando varias actividades de extensión como reglas de puntuación, habilidades para trabajar las palabras, direccionalidad de la escritura, etc. que propicien los aprendizajes esperados en los niños y previamente planificados por el profesor. La relectura constante de estos textos va a ser muy significativa para el aprendizaje de diversos conocimientos de los distintos subsectores, por lo que luego de realizada la actividad, estos deben quedar al alcance de los niños para una posterior lectura independiente.


Si bien estas estrategias no se ven complicadas de implementar, en muy pocos colegios se llevan a cabo hoy en día, en mi experiencia personal nunca me a tocado ver que se realicen actividades de este tipo en los jardines infantiles o establecimientos, excepto la lectura en vos alta que es más frecuente, pero con menos especificidad de la que propone el programa AILEM.
Creo que es fundamental que como futuras educadoras implementemos este tipo de estrategias desde nivel inicial, ya que es en este momento cuando los niños poseen mayores capacidades de aprendizaje para una futura comprensión lectura y escritura eficaz.


Bibliografía

Bibliografía:- Baeza, P., Razmilic, T. Estrategias de enseñanza del Programa AILEM-UC. Lectura en voz alta. 2006-2007
- Baeza, P., Razmilic, T., Solis, M. Estrategias de enseñanza del programa AILEM-UC. Lectura compartida. 2006-2007
- Baeza, P., Razmilic, T., Solis, M., Suzuki, E. Estrategias de enseñanza del programa AILEM-UC. Escritura interactiva. 2006-2007

domingo, 23 de septiembre de 2007

¿Es la conciencia fonológica clave para el proceso de aprendizaje de la lectura y escritura?

¿Es la conciencia fonológica clave para el proceso de aprendizaje de la lectura y escritura?

Algunos autores plantean esta frase como una afirmación, otros la refutan aduciendo que el aprendizaje de la lectura y escritura son el pie inicial para desarrollar la conciencia fonológica. Según el doctor Luis Bravo Valdivieso, “La conciencia fonológica de los niños preescolares y escolares básicos se da como una Zona de Desarrollo Próximo (definida por Vigotsky “como la distancia que hay entre el nivel de desarrollo real de los niños y su desarrollo potencial, bajo la guía de un adulto” (Wertsch, 1988).)Para el aprendizaje convencional de la lectura” (Bravo, ¿?).

Para que esta zona de desarrollo próximo sea efectiva y el adulto logre entregar a los niños una verdadera guía para ellos, es necesario que se creen planes de trabajo, basadas en las necesidades reales de los niños, las cuales pueden determinarse gracias a un diagnóstico inicial que el educador o el adulto que va a impartir la instrucción efectúe a los niños en su totalidad y poniendo mayor énfasis en los niños que presenten ciertas dificultades en el área de la iniciación de la lectura y escritura derivada de ciertos problemas de aprendizaje.

Lo primero que el educador entonces debe efectuar, es determinar el umbral mínimo en el que puede empezar la instrucción y además tener en cuenta en umbral superior de cada uno de los niños, de manera que la instrucción no sea lo suficientemente compleja para que éstos logren llegar a reales objetivos que estén a su alcance pero que no sean muy básicos para ellos.

La mediación del adulto es fundamental en este proceso, ya que es quien debe hacer que los niños tomen conciencia de los componentes fonológicos de las palabras, transformen cualitativamente sus estructuras cognitivas del lenguaje oral, y puedan integrar las secuencias de fonemas a las palabras escritas gracias a la asociación de los componentes del lenguaje oral con los del lenguaje escrito.

Siguiendo bajo esta misma mirada la conciencia fonémica es vista como la “capacidad que tiene el sujeto de descubrir en la palabra, una secuencia de fonos o de fonemas, la cuál sería consecuencia de la instrucción formal en lectura en un sistema alfabético” (Bravo, ¿?).

Los resultados de diversas investigaciones dieron como resultado que niños que poseen mayores habilidades para manipular sílabas o fonemas aprende a leer más rápido (Lonigan, Burgess, Anthony , Baker, 1998), es decir, los que niños que poseen una mayor conciencia segmental y sensibilidad a las semejanzas silábicas tienen mayores probabilidades de manejar la lectura y escritura antes que los niños que no poseen o no han adquirido estas habilidades. Siendo fundamental la instrucción sistemática de ciertos ejercicios de reconocimiento de fonemas, omisión de estos, agregar algunos, etc.

Según Sylvia Defior existen 15 procesos para evaluar o mejorar las habilidades fonológicas mediante el entrenamiento. Estas son:

1. Juzgar la duración acústica de las palabras: diferenciar si la pronunciación de una palabra es más larga que otra.

2. Identificar las palabras de una frase: puede ser mediante palmadas, contándolas, etc.

3. Reconocer una unidad de habla (sílaba o fonema) en palabras: señalar la posición de una unidad dentro de una palabra mediante fichas, bloques, etc.

4. Reconocer o producir rimas: se usan pares de palabras buscando que sean de alta frecuencia para los niños y les parezcan familiares.

5. Clasificar palabras por sus unidades (sílabas o fonemas): si dos o más palabras empiezan con el mismo fonema inicial, si comparten algún sonido intermedio, etc.

6. Sintetizar o mezclar unidades (sílabas o fonemas) para formar palabras: deletrear palabras para que el niño las secuencie y asigne significado.

7. Aislar una unidad (sílaba o fonema) de una palabra: consiste en agregar una unidad a la palabra. Por ejemplo si agregamos la p al comienzo de la palabra lata. ¿Qué ocurre?

8. Contar Unidades (sílaba o fonema): por ejemplo: ¿cuántos sonidos escuchas en SOL?

9. Descomponer en unidades (sílaba o fonema): por ejemplo: ¿Qué sonidos escuchas en la palabra baño?

10. Añadir unidades (sílaba o fonema): por ejemplo: ¿Que palabra resultara si le agregamos s a alto?

11. Sustituir una unidad (sílaba o fonema) de una palabra por otra: ejemplo: ¿cómo quedaría la palabra gato si cambiamos las g por la p?

12. Suprimir una unidad (sílaba o fonema) de una palabra: ejemplo: que palabra resultaría si decimos la palabra pato sin la letra p?

13. Especificar que unidad (sílaba o fonema) ha sido suprimida en una palabra: por ejemplo. ¿Qué sonido escuchas en caro que no está en aro?

14. Invertir el orden de las unidades de una palabra: por ejemplo: ¿Qué palabra resultaría si decimos sol al revés?

15. Escritura inventada: que los niños escriban series de palabras, donde relacionen los elementos fónicos con los elementos escritos.

Existen grandes diferencias entre las demandas cognitivas que plantean las diversas tareas fonológicas y por ende en la dificultad que presenta cada una de las antes mencionadas. Por lo que es esencial seguir una secuencia evolutiva clara en que “primero aparecerá la capacidad de manipular las palabras, luego las sílabas y por último los fonemas. (Defior,1996). De esta manera los niños podrán transformar sus habilidades cognitivas en habilidades funcionales cognitivas, las que propiciarán el aprendizaje de la lectura y la escritura.

Bajo mi apreciación personal, considero que como se ha visto en casos comprobados, la instrucción de ciertos componentes fonémicos es una de las predictoras para la enseñanza de la lectura y escritura, es decir, son una base importante para el desarrollo de nuevas y más complejas habilidades.

Bibliografía

Bravo, L. (¿?). La conciencia fonológica como una zona de Desarrollo próximo para el aprendizaje inicial de la lectura. Santiago, Chile.

Defior, S. (1996). una clasificación de las tareas utilizadas en la evaluacion de las habilidades fonológicas y algunas ideas para su mejora. universidad de granada.

Lonigan, Burgess, Anthony , Baker. (1998). development of phonological sensitivity in 2 to 5 year old children. journal of educational psychology , págs. 294-311.

Wertsch. (1988).

martes, 28 de agosto de 2007

Lo impreso, un acercamiento a la enseñanza de la lectura y escritura

Desde hace ya un par de años que el mundo se a vuelto cada vez más dinámico y lleno de información que nos llega de un lado y otro, desde diferentes fuentes y contextos, y que a provocado interés tanto en niños como adultos. La televisión, los carteles en las calles y los textos auténticos que podemos encontrar en nuestra vida diaria hacen que los niños se expongan desde muy corta edad a la Cultura letrada, lo que es fundamental al considerar el enseñarles la lectura y escritura o guiarlos en la adquisición de conceptos relacionados.

Los logos o palabras que los niños ven habitualmente en su vida cotidiana son una fuente de impresiones que permiten al niño relacionar ciertos fonemas con los grafemas que ve en la imagen, siempre que estén en contextos con significado que le permiten ir organizando su mundo y el ambiente en que vive y desarrolla sus habilidades.

Así también, es fundamental que los niños se sientan motivados con aquellas impresiones que sean cercanas a ellos, ya que un logo usado en otro país, tal vez no va a representar nada para el niño mientras que algo tomado de su entorno lo va a ayudar a darse cuenta de detalles tales como direccionalidad y que las letras son aquellas que traen el significado y no las imágenes entre otras.

El adulto es parte fundamental en el proceso de adquisición del lenguaje oral, ya que deba actuar de mediador con los niños, de manera que muestre desde distintos puntos de vista y distintas estrategias la lectura y la escritura de manera que sea más fácil para los niños el llevar a la practica los conceptos . Estas interacciones entre adulto y niño potencian el desarrollo de las habilidades relacionadas con el lenguaje en los niños, por lo que es de suma importancia que el adulto complemente las experiencias que han tenido éstos en sus contextos, con nuevas formas de aprendizaje y usando diversos recursos como letras de cartón, boletas de servicios, listas de supermercado, etc.

Como Educadores o padres debemos acercar a nuestros niños a la cultura letrada y no hay mejor manera que utilizar los recursos que éstos más conocen y aquellas muestras impresas que utilizamos día a día. Pero los niños no solo deben ver estas letras, frases o nombres, sino que el adulto debe compartir con ellos la lectura de aquello que es más significativo para ellos.

Cuando por primera vez uno de mis sobrinos se acerco a mi y me dijo... Nani yo quería Coca-cola y no Pepsi quedé impresionada, pensé que ya sabia leer porque las dos bebidas eran del mismo color osea que no podía darse cuenta de otra manera que una botella decía Coca-cola y la otra Pepsi , pero luego de leer varios textos relacionados con el tema (ver bibliografía complementaria) pude darme cuenta de que no es que mi sobrino supiera leer al decirme eso, sino que en otras situaciones anteriores cuando el había preguntado que bebida era le habían respondido con el nombre de estas, y ahora él solo relacionaba esas formas que había observado antes con lo que estaba escrito. Y ¿porqué no aprovechar esas instancias tan cotidianas para enseñarles a los niños como suenan las distintas palabras escritas?, para que luego relacionen que esos dibujos como los ven ellos siempre al estar juntos suenan igual y de esa manera se vayan nutriendo de lo escrito. Es nuestro deber entonces presentar a los niños distintos materiales y textos impresos, ayudarlos en la mediación de lo que ellos pueden leer a pesar de no saber todavía los conceptos de la lectura y escritura. acercarlos a descubrir nuevas palabras y nuevas cosas, incentivarlos a explorar en la vida cotidiana y estimularlos a aprender cosas que les sirven para llegar a objetivos concretos que sean significativos para ellos como poder jugar a algo que los incentive o pedir algo que esta escrito de una manera y no de otra como en el caso de mi sobrino.


Bibliografía

Emergent Literacy and Oral Language Development
Debra Stevens Peterson. Barbara M. Taylor. Ruth Hansen.

Environmental Print Awareness in Young Children
Danielle Z. Kassow

martes, 21 de agosto de 2007

Saber Escuchar y Hablar, la base que podemos enseñar para un futuro mejor

Es sabido que para que una persona nos sea agradable no solo debe decir cosas que nos deleites, sino también debe poseer la cualidad de escuchar y poner atención a lo que nosotros decimos. El saber escuchar nos permite establecer buenas relaciones personales y sociales además de ser fundamental para el logro de los aprendizajes de los estudiantes, lo que muchas veces se transforma en un problema para los niños y por lo que es necesario enseñarles a establecer en ellos el hábito de escuchar.

¿ Como logramos eso?, mediante distintos ejercicios que reúnan características tales como ser dinámicos, que tengan sentido para quienes realicen las actividades, que la información se entregue en forma amena y variada, que a los niños se les permita dar opiniones, contar sus propias historias y experiencias personales libremente, etc.

Algunas de las actividades o juegos verbales que pueden realizarse con el fin de reforzar las habilidades lingüísticas y auditivas son el uso de aliteraciones ( palabras que comienzan con el mismo sonido) y rimas, dónde los niños deban descubrir palabras que suenen parecido fonéticamente.

Los juegos de palabras como jugar al Verdadero o Falso, series de palabras, cadenas y toas aquellas actividades que despierten el interés de los niños son apropiadas para fortalecer en ellos las competencias lingüísticas y su capacidad de atención hacia los demás.

El educador siempre debe tener en cuenta que los niños aprenden cuando están motivados y cuando siguen a un modelo de conducta apropiado. Es por esta razón que padres y educadores deben establecer normas para ejercitar las habilidades de escuchar y de hablar e los niños.

Desde los primeros meses de vida, los niños reaccionan frente a distintos sonidos de diferente manera. Para ello seleccionan los distintos estímulos en diferentes tipos de “escuchar” como escuchar atencional (cuando escuchamos las instrucciones de un maestro por ejemplo), escuchar analítico (cuando analizamos lo escuchado para resolver algo), escuchar apreciativo ( por el goce o deleite, por ejemplo la música, un poema, un cuento, etc.) y finalmente el escuchar marginal( estímulos que captamos además de nuestro foco principal).

Cada uno de estos distintos modos de escuchar, son importantes para los niños, ya que lo van ayudando a integrarse dentro de un mundo social de múltiples relaciones con los demás y dónde el ruido y lo sonidos son parte importante de nuestro diario vivir.

Es esencial que se les presenten diversas experiencias a los niños dónde ellos mismos sean los protagonistas y donde también deban escuchar y respetar los turnos de los demás. El educador a través de las múltiples actividades que realice con los niños debe integrar y enriquecer el vocabulario de los niños, aprovechando para ello la lectura de cuentos y poesía escogida especialmente según el nivel de los niños con los cuales se van a trabajar las actividades, así como conversaciones estimulantes y significativas, que les permitan recordar las palabras nuevas y poder agregarlas o utilizarlas en contextos con significado. Además si utilizamos la literatura para estos fines, también se estará desarrollando la imaginación y el lenguaje de los niños, así como producir agrado en ellos, favorecer el juicio valórico y estético, desarrollar el pensamiento y ayudar comprender las conductas humanas.

La música es otra herramienta que permite al niño discriminar entre distintos tipos de sonidos, los cuales pueden causar diferentes reacciones en los niños. Paul Madaule en su texto “ la música una invitación a escuchar, al lenguaje y al aprendizaje” señala que hay diferencias entre escuchar y oír, dónde el primer concepto está referido al acto voluntario de enfocar los sonidos que deseamos escuchar, mientras que oír está relacionado con la percepción pasiva de los sonidos.

El escuchar es esencial para el logro de los aprendizajes, por lo que es primordial como educadores el darnos cuenta de posibles problemas auditivos que tengan nuestros alumnos para intentar alguna solución u reparación del daño en lo posible. La música les sirve a los niños para el desarrollo del control audio-vocal, donde más tarde además se le agregará un valor o significado a cada una de las palabras que el niños vocalicen.

El método Tomatis es un programa de entrenamiento auditivo en frases según las distintas etapas del desarrollo. Pretende mejorar la capacidad de escuchar y reducir los problemas relacionados con escuchar gracias a diferentes tipos de música como la música de Mozart, Los cantos Gregorianos y las canciones Infantiles las cuales causan distintos efectos en los niños como relajarlos, vigorizarlos y estimularlos entre otras.

Bibliografía

Cómo desarrollar el Lenguaje en su hijo
Baeza, P y Solís, M.C.: Desarrollo del Escuchar y del Lenguaje en NB1
Condemarín, Mabel : Juegos Verbales
Paul Madaule: La música una invitación a escuchar

miércoles, 8 de agosto de 2007

Alfabetización Inicial

Después de la lectura de los textos de Baeza, Teberosky, Bravo y un artículo de Kathleen Roskos, podemos referirnos a la alfabetización inicial como los “procesos mediante el cual el niño construye los conceptos sobre las funciones de los símbolos (Baeza, 2007)”, para lo cual son fundamentales las experiencias previas que haya tenido el niño y lo significativas que éstas hayan sido para él. Así, por ejemplo, un niño que vive en constantes interacciones con el lenguaje escrito ya sea a través de textos auténticos, experiencias de lectura compartida, o relaciones que efectúe con personas que conozcan el lenguaje escrito y las reglas lingüísticas del idioma en que se desarrolle su aprendizaje, va a tener mayores oportunidades de integrarse o dominar la lengua que un niño que no tiene esas oportunidades.

la alfabetización inicial, también se le llama Emergente, ya que se ve la lectura, matemáticas y escritura del niño como algo que emerge de ellos y su óptimo desarrollo depende de las experiencias previas que haya tenido el niños con un ambienten rico en textos, que permitan las interacciones entre niños con los libros y también de niños y adultos en juegos de palabras y otras actividades que estimulen la adquisición de una conciencia Semántica y Sintáctica.

En cuanto a la adquisición o modo en que se dan estos procesos que integran a los niños en el lenguaje escrito y la decodificación de símbolos, destacan las diferencias existentes en cuanto a cómo ven los constructivistas que se van dando las distintas fases en el proceso de lectoescritura en relación a lo que piensan los cognitivistas y los socio constructivistas.

Por una parte los teóricos Cognitivistas plantean “la lectura como una actividad cognitiva compleja (Teberosky, 2007)” definida como habilidades que se desarrollan e información que se aprende. Además en el aprendizaje inicial de la alfabetización, intervienen dos procesos esenciales, la Conciencia Fonológica, referida como la capacidad de analizar y segmentar palabras en unidades menores, reconociendo sus fonemas y grafemas y el Reconocimiento de palabras. Los cognitivistas plantean de esta manera que las habilidades se desarrollan por etapas sucesivas. Primeramente con la toma de conciencia de las letras y números para luego relacionarlas con su valor sonoro. Para la adquisición de la Conciencia Fonológica se pueden usar diferentes juegos como método o estrategia de enseñanza. Algunos ejemplos son el uso de rimas y aliteraciones con los niños, lo que no solo les entretiene sino que los mantiene pendientes acerca de los sonidos de las palabras. Además se pueden inventar muchos juegos de palabras o identificación de conceptos. En mi experiencia personal, durante la Practica II realicé una actividad con niños de Kinder dónde ellos sacaban tarjetas con imágenes desde una cajita y tenían que decir con que vocal empezaba la imagen expuesta, lo que resulto muy entretenido para los niños y además los ayudó a reforzar aquellas vocales que no tenían muy claras o a relacionarlas con las imágenes.

Por otro lado, Los teóricos Constructivistas tienen una postura concreta acerca de la adquisición del lenguaje escrito por parte de los niños donde éstos construyen sistemáticamente su propio aprendizaje. Desde el punto de vista evolutivo, ellos afirman que los “niños elaboran hipótesis sobre el funcionamiento de la escritura a partir de la información que obtienen del ambiente (Teberosky, 2007)” de donde interpretan los textos comerciales antes de aprender a leer, lo que les va dando claves para la adquisición del lenguaje escrito. A uno de mis sobrinos por ejemplo que tiene 3 años de edad le encanta preguntar con que letra empieza el nombre de todas las personas que se cruzan en su camino. Hace unos días después de que el preguntara a todos los miembros de mi familia cuál era su letra, le pregunté a el lo mismo y me respondió que su letra era la M de McDonald’s, la verdad nunca imaginé que el supiera ni siquiera cual era la letra M, pero no solo sabía con cual empezaba su nombre, sino que la relacionó con un letrero que el ve siempre que va a Mc Donald’s a comer.

El hecho de que el ambiente influya en ellos, se parece mucho a la tercera de las perspectivas que analizan los procesos de adquisición de conceptos escritos, dónde se considera la lectura y escritura como una práctica social influida por el carácter etnográfico de donde se sitúen los niños; Esta perspectiva es llamada comúnmente como Socio constructivismo o Constructivismo Social. Se caracteriza además por las interacciones entre adultos y niños que facilitan el acercamiento de los estos a la cultura letrada especialmente en las actividades de lectura de cuentos, periódicos, textos auténticos, publicidad, etc.

En mi experiencia personal, creo que las actividades de lectura compartida son una muy buena estrategia para el aprendizaje de palabras nuevas y de vocabulario en general, además de ayudar a los niños a la adquisición del lenguaje escrito, ya que al conocer los cuentos que sistemáticamente se les van presentando, ellos van memorizando ciertas frases o palabras que luego relacionan con los sonidos cuando alguien le lee el cuento y se crea un ambiente agradable para ellos donde se sienten protegidos y felices lo que hace que los aprendizajes sean más significativos.

De todas maneras las tres perspectivas de aprendizaje (cognitivista, constructivista y socio constructivista) llegan al mismo consenso de que mientras más temprano se desarrollen las instancias para que niños interactúen en un ambiente rico en letras, números, símbolos, etc. mejor va a ser, ya que todas aquellas experiencias tempranas que el niño tenga con las letras van a ser de fundamental importancia para su posterior desarrollo en cuanto a la comprensión de los distintos grafemas y su significado funcional en el contexto.

Algunas investigaciones recientes han dado como resultado, la importancia de la alfabetización inicial como clave para el rendimiento posterior del lector. Así se descubrió que el aprendizaje del lenguaje escrito comienza antes de los primeros cursos de enseñanza básica, lo que fijaría una base para que tanto Educadoras de Párvulos como profesores de nivel pre-escolares fijen metas concretas en cuanto a la enseñanza de estos conceptos. En Chile, la situación no es muy distinta a otros países más desarrollados en cuanto a educación, ya que, los resultados a estas investigaciones se mostraron análogos a los extranjeros. El Dr. Luís Bravo Valdivieso en el artículo “La Alfabetización inicial un factor clave del rendimiento lector” publicado en la Revista Digital Umbral 2000 en Enero 2004 se refiere a que el éxito en el aprendizaje de la lectura depende del desarrollo cognitivo y psicolingüístico de los niños en los años anteriores a la educación básica, especialmente en el periodo del jardín infantil, lo que determina parcialmente el aprendizaje del lenguaje escrito antes de ingresar a los cursos de enseñanza básica.

El efecto “Lector inicial” que arrojan los resultados, da cuenta de la estrecha relación que presentan los niños que tienen mayores facilidades para la adquisición de conceptos relacionados con la lectura al contrario de los niños que presentan ciertos problemas o dificultades en los procesos cognitivos que implica la adquisición del lenguaje, lo que desencadena que en su mayoría estos niños con dificultades presenten posteriores problemas de aprendizaje en ciertos niveles.

Pero aquellos niños con ciertas dificultades en el aprendizaje de la lengua escrita, pueden ser apoyados en programas especiales que se preocupen de nivelarlos de alguna manera con los aprendizajes esperados, y que logren incentivarlos y estimularlos en crear una conciencia fonológica que les permita asociar los grafemas o signos gráficos con el sonido de las letras o números. Según estas mismas investigaciones, se detectó que aquellos niños que son nivelados a tiempo, pueden lograr grandes avances en cuanto a aprendizajes y conceptos. Es en este momento cuando alguien puede plantearse la siguiente duda, ¿Quienes deben ser los que apliquen estos programas?, evidentemente la responsabilidad está en manos de los Educadores que trabajen con estos niños, y no sólo apoyando a los alumnos, sino que entregando pautas y guías concretas a los padres y familias de éstos para la continuidad del programa efectuado en los centros educativos en sus propios hogares, lo que además otorga la cuota de mayor significáncia de los contenidos, ya que no hay mejores personas que los propios padres para ayudar a sus hijos.

En conclusión, la alfabetización inicial es cada vez más común en los niños por la constante visualización de distintos medios que presentan desafíos para ellos en cuanto a lo escrito, lo que despierta su curiosidad y los lleva a preguntar, formar hipótesis y responder a sus necesidades. Por ejemplo niños que quieren jugar en el computador van relacionándose con diferentes letras, números y signos gráficos que le abren un nuevo mundo, con el cual para poder interactuar necesitan saber interpreta estos signos. Por eso como Futura Educadora de Educación de Párvulos considero es fundamental el lograr que se generen interacciones entre los niños y el lenguaje y una muy buena fuente de información es el mismo adulto o niños que ya dominen el lenguaje escrito.

Bibliografía

Baeza, P. (Agosto de 2007). www.puc.cl. Recuperado el 06 de Agosto de 2007, de www.puc.cl

Teberosky, A. (2007) www.puc.cl. Recuperado el 6 de Agosto de 2007 de www.puc.cl

Kathleen Roskos: The Essentials of Early Literacy Instruction

Luis Bravo Valdivieso: La alfabetización inicial un factor clave del rendimiento lector



martes, 7 de agosto de 2007

Comienzo

Desde que nacemos vamos formándonos como personas, como seres vivos y miembros de distintos grupos con los cuales compartimos día a día.
Nací en Santiago de Chile pero viví hasta los 18 años en Curicó, una ciudad de la VII Región, donde fui al colegio, conocí a grandes amigos y me formé como persona.
Cuando salí del colegio tenía la meta de venirme a vivir a Santiago y formarme como una Educadora de Párvulos de calidad, de la cual no solo estuviesen orgullosos mis papás, sino todos los que me rodearan.
creo que con este blog donde publicaré mis reflexiones acerca de la didáctica de la Lengua y aquellos trabajos relevantes a lo que estudio, intentaré superar mis miedos por una parte, y mostrar al mundo que la Educación de Párvulos no son solo cortar y pintar como muchos creen, sino que tiene un trasfondo que la hace ser una carrera muy importante.
Espero que este blog sirva además para aquellas personas que buscan una mirada crítica a ciertos aspectos, y que podamos compartir nuestros conocimientos.

Bernardita Eyheramendy L.